Hace unos días una buena amiga dejo Egipto, ella regresaría a Inglaterra y tuve ese extraño presentimiento que no volvería a verla, un día antes de su partida sentí la necesidad de hacerle un regalo y eso que yo soy muy mala para hacer obsequios, pensé un largo tiempo que podría regalar quería dar algo especial para que me recordará algo hecho por mí, y recordé que lo único que se hacer bordar. Cuando tenia 8 años en las vacaciones mi tía me enseño en largas sesiones de hilos y agujas a bordar y bueno sin mas tiempo que perder puse manos a la obra y aquí el resultado.